La hora bruja me pilló en la calle. En
el momento justo en que miraba el reloj las manecillas apuntaban al
12 y el segundero se alineó en el momento preciso en que miraba a la
esfera. Como si de una brújula que me estuviese diciendo algo se
tratase.
Y yo, que soy un romántico, escéptico
solo en la fachada, miré al cielo buscando mi Estrella Polar para
terminar encontrando al primer golpe de vista la constelación de
Orión.
En ese momento Quique canta “polvo en
el aire. Mi estrella fugaz, mi amiga” solo para mi.
La hora bruja me pilló en la calle, el
cielo estaba claro como nunca y la guitarra acústica le ponía banda
sonora a ese momento. Y tu... tu no estabas aquí.
1 comentario:
Ay, a mí es que este hombre me deprime mogollón, es como un Álex Ubago pero en plan bien xD
No te enfades ;)
Un beso!
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